Este tipo de situaciones son bastante más frecuentes de lo que pensábamos. Así, no es extraño que alguien sea propietario de una parcela y que sin solicitar licencia de obra alguna haya construido una vivienda en ella. Dicha edificación no constará en el Registro de la Propiedad y esa ausencia de papeles es la que puede despertar la desconfianza de los posibles interesados.
Uno de los principales escollos es que ese comprador debe abonar el dinero en efectivo, pues no podrá solicitar una hipoteca para su adquisición. Un aspecto que, sin duda, dejará fuera a muchos posibles candidatos que no cuentan con esa liquidez en su cuenta.
Tampoco tendrá forma de saber si existen cargas sobre la casa. Este último detalle suele reflejarse en la inscripción registral, pero aquí no es posible esta opción ya que, como decíamos, ésta no existe.
El comprador tendrá que hacer frente a los costes del registro.
Sin embargo, como vendedores podemos vencer esa desconfianza aportando al comprador la siguiente documentación:
Facilitarle una escritura del terreno en el que se ubica la vivienda. Este documento es básico y sin él difícilmente podremos consumar la venta.
Una vez que le hemos mostrado la escritura del terreno o parcela, podemos acompañar al comprador al Registro de la Propiedad para pedir una nota simple. En este documento podrá comprobar que todos los datos coinciden con la documentación que le hemos aportado.
El comprador querrá saber si la casa es legalizable o no. Esta consulta la puede realizar acudiendo a los Servicios Técnicos de Urbanismo del municipio donde se encuentra la vivienda.
Y, por último, es preciso averiguar si la casa se ajusta al decreto de habitabilidad vigente que nos permitiría obtener la necesaria cédula de habitabilidad. Es posible que no sea así, pero que solo sean precisas unas obras para que el Ayuntamiento dé el visto bueno a su concesión.
En cualquier caso, lo que debemos tener bien presente, como bien recalcan en este artículo de Certicalia, es que pretender vender un terreno en el que haya construida una casa que no consta en la escritura no es una acción ilegal.
Aunque sí que debemos matizar que lo que en realidad es objeto de venta es la parcela y, por lo tanto, la tasación se centrará en el valor en euros del metro cuadrado del suelo.
En conclusión, vender una casa sin estar registrada es más común de lo que pensamos pero puede costarnos un esfuerzo extra encontrar un comprador interesado en ella. No obstante, si todo es correcto, no hay razón para no acabar dando con el candidato adecuado.
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