Los elementos de las zonas comunes en una comunidad de propietarios son aspectos muy delicados que hay que cuidar y saber cómo usar correctamente para no afectar a la convivencia.
Antes de nada, aclarar que existen dos tipos de garaje. Los individuales y los comunitarios, que se encuentran dentro de una finca de propietarios.
En el caso de los garajes individuales, no tienes problemas para dejar dentro los enseres que consideres, y puedes utilizarlo de trastero. En el caso de los comunitarios, hay ciertas restricciones que debes conocer.
Si hablamos de jurisprudencia y de restricciones, puede que te preguntes ¿hay alguna Ley que regule lo que se puede hacer y lo que no, en las plazas de garaje? Y si, al pertenecer a la comunidad de propietarios, el uso de las plazas de garaje está regulado por la Ley de Propiedad Horizontal (LPH).
Esta Ley no dice nada sobre la prohibición de poner muebles de almacenamiento en el garaje.
Es decir, puedes usar tu plaza como trastero siempre que no modifiques la estructura de tu plaza, ni sobrepases sus límites invadiendo los del vecino o los del resto de la comunidad. No puedes almacenar productos o materiales peligrosos o que pongan en peligro la seguridad del edificio o de sus habitantes.
El artículo 7.2 de la LPH dice que, el propietario: “podrá usar su espacio como estime oportuno siempre que no desarrolle actividades que resulten dañinas para la finca que contravengan disposiciones generales sobre actividades molestas, nocivas o peligrosas”.
Más allá de eso, es conveniente consultar a la comunidad de propietarios y ver los Estatutos. En algunas comunidades, estos pueden prohibir el almacenamiento de muebles o el uso de la plaza de garaje para cualquier otra cosa que no sea el parking de vehículos.
Vamos a repasar todos los supuestos que pueden darse en una comunidad de propietarios a la hora de usar tu garaje para algo más allá de aparcar un vehículo.
Más allá de lo que dice la LPH y los estatutos, debes saber que el almacenaje, por no tratarse de la actividad para la cual fue concebida el parking, puede que no se contemple dentro de los seguros.
En este caso tendría que hacerse cargo el dueño de la plaza de cualquier daño o desperfecto que se produjera a causa de usar el garaje como trastero.
En principio, puedes hacer mucho en tu plaza de parking siempre y cuando cuentes con el beneplácito del resto de propietarios, y no invadas su espacio ni las zonas comunes.
Los límites que hemos comentado se centrarían en:
Llevar a cabo cualquier acción que esté contemplada y prohibida en los estatutos de la comunidad, que prevalecerán por encima de la LPH en este caso.
Ahora ya sabes todo lo necesario para utilizar tu plaza de garaje para el almacenamiento de objetos, si la puedes convertir en un trastero, y todo lo que está permitido hacer en ellas. Consulta siempre con el presidente y el resto de la comunidad para que prevalezca la buena convivencia y no surjan problemas con otros propietarios.
¿Qué se puede poner en una plaza de garaje?
En una plaza de garaje se pueden colocar vehículos de motor, como automóviles, motocicletas o bicicletas. Además de los vehículos, es común utilizar parte del espacio para el almacenamiento de objetos relacionados con el vehículo, como herramientas, neumáticos de repuesto o artículos de limpieza. Sin embargo, las plazas de garaje generalmente no deben utilizarse para el almacenamiento de artículos no relacionados con vehículos, como muebles o equipos domésticos.
¿Cómo denunciar un garaje ilegal?
Si sospechas que una plaza de garaje está siendo utilizada ilegalmente o se encuentra en una ubicación no autorizada, debes ponerte en contacto con las autoridades locales o el departamento de urbanismo de tu municipio. Proporciona toda la información disponible sobre la ubicación y la situación del garaje en cuestión. Las autoridades competentes investigarán y tomarán las medidas adecuadas en caso de que se confirme la ilegalidad.
¿Qué se puede guardar en un garaje?
En un garaje se pueden almacenar una variedad de objetos, pero su principal función es el resguardo de vehículos. Además de los vehículos, se pueden guardar herramientas, equipos deportivos, bicicletas, suministros de jardinería, neumáticos de repuesto y otros artículos relacionados con el mantenimiento de vehículos y actividades al aire libre. El almacenamiento de materiales peligrosos o inflamables generalmente está prohibido por razones de seguridad.
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