En cualquier caso, existe tal variedad que difícilmente podremos abordarlos todos en este artículo. No obstante, sí que vamos a exponer de manera clara algunas de las opciones más exitosas y predominantes.
Eso sí, recuerda que a la hora de escoger debes atenerte a las dimensiones del baño y, por lo tanto, conviene decantarse por un lavabo que se adecúe al espacio disponible para que no resulte aparatoso.
Era muy común ver este tipo de lavabos hace una década, pero han quedado desplazados y apenas se emplean ya. Pero es cierto que existe una cierta tendencia a devolverles su gloria perdida, especialmente los que presentan una estética vintage.
Los lavabos volados quedan suspendidos en el aire y ofrecen como ventaja su fácil limpieza. A esto se suma que se obtiene sensación visual del cuarto baño amplio, además de ganar espacio. Por lo tanto, es una opción que gusta mucho y que se ve especialmente en baños de restaurantes u hoteles.
Podrás disfrutar de un lavabo bonito y vistoso sobre la encimera, además de una buena capacidad de almacenaje.
Sin duda, estamos ante la solución más decorativa, pero también con una excelente funcionalidad, ya que podremos disponer de cajones y una encimera amplia para colocar nuestros artículos de aseo.
Todavía nos queda hablar de una categoría de lavabos en función del material empleado para su fabricación. En este sentido, podemos hablar de un variopinto muestrario de lavabos. Los analizamos:
Los de acero inoxidable: este tipo de lavabos requiere un óptimo mantenimiento para evitar la corrosión. Recuerda que podemos encontrarlo en diferentes aleaciones y, por lo tanto, calidades.
Los de terrazo: este material se ha empleado de manera tradicional para conformar lavaderos.
Los de cemento: baratos, modernos y versátiles. Sin duda, lo tienen todo para que muchos se animen a incorporarlo a su baño. A esto se añade que nos permiten múltiples diseños. Recuerda que posteriormente habrá que pulirlo para asegurar una correcta impermeabilización.
Los de materiales sintéticos: determinados materiales como la resina o el cuarzo compacto parecen llamados a ocupar un lugar preeminente en nuestros hogares.
Sin duda, elegir puede ser una tarea abrumadora, pero es cierto que casi todas las posibilidades reseñadas resultan muy atractivas, aunque nuestros gustos y necesidades, además del presupuesto, decantarán la balanza hacia uno u otro lado.
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