Cada vez hay más hogares que se animan a tener un perro en casa. De hecho, en el último lustro ha aumentado en un 40 % el número de mascotas en casa y la mayoría de ellas se tienen en el interior de los hogares. Aunque nos encanta su compañía y los consideramos un miembro más de la familia, es cierto que a veces ocasionan malos olores, especialmente cuando por accidente orinan en la alfombra o incluso en el sofá. Afortunadamente hay maneras de remediar todos estos problemas. En concreto, podemos valernos de una botella de spray en la que hayamos preparado una mezcla a partes iguales de agua y vinagre blanco con un par de cucharadas de bicarbonato sódico. Solo hemos de rociarlo sobre la mancha y secar rápidamente con un paño seco.
Ciertas comidas como el pescado tienen la habilidad de quedarse impregnadas por toda la casa y, si somos muy sensibles, pueden arruinarnos hasta la digestión. Sin embargo, hay maneras muy útiles de hacerles frente. Un sencillo truco es cerrar la puerta de la cocina mientras guisamos o la de los dormitorios y el salón. De esta manera evitaremos que los textiles, como la ropa, las sábanas o el tapizado del sofá, absorban este molesto olor. Otra manera de neutralizarlo es poniendo a hervir a fuego lento unas mondaduras de limón acompañadas de unos ramitas de canela. Si a pesar de todas estas recomendaciones para eliminar olores en casa, este persiste, puedes echar mano de un último consejo. Así, puedes llenar un cuenco con vinagre blanco pues es un remedio muy eficaz para acabar con esos molestos aromas.
El lavavajillas y la lavadora son una fuente constante de malos olores, pero hay métodos muy eficaces y baratos de ponerles coto. Una vez más, el vinagre y el bicarbonato acuden en nuestro auxilio.
Lo cierto es que cuando advertimos un pequeño tufo, muchos corremos a limpiar el filtro imaginando que allí se están acumulando restos de comida que son los causantes de este incómodo olor. Por lo tanto, conviene tener bien aseado este elemento del lavavajillas, pero podemos hacer algo más. En concreto, en la base de la máquina debemos colocar un recipiente con vinagre blanco y, a continuación, ponemos en marcha el lavavajillas completamente vacío. Cuando termine el ciclo de lavado, ¡el molesto olor habrá desaparecido!
También la lavadora suele acumular malos olores y esto puede ser especialmente inoportuno ya que ahí lavamos nuestra ropa. Podemos acabar con ellos colocando una mezcla de agua a partes iguales con vinagre blanco y cuatro cucharadas del versátil bicarbonato. Lavamos con la máquina vacía y agua caliente y, cuando termine, no quedará rastro de ese olor a humedad que tanto nos incomodaba.
Si quieres complementar todos nuestros consejos con algunos más, puedes hacerlo en este completo artículo de la asociación AARP.
Recuerda aplicar todas estas recomendaciones en casa, pues si lo haces acabarás venciendo a esos desagradables olores. Eso sí, conviene hacer acopio de productos tan indispensables como el vinagre blanco o el bicarbonato pues se convertirán en las armas más eficaces para combatirlos.
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