En cualquier caso, has de saber que al adquirir una piscina para nuestra terraza tenemos que tener muy en cuenta el peso, pues si es excesivo puede acabar afectando al forjado y la tela asfáltica que impermeabiliza el suelo y, por lo tanto, causar problemas en la estructura, además de ocasionar goteras en los pisos inferiores o garajes.
En este sentido, el Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos de Zaragoza, según podemos leer en el Heraldo, alerta del peligro de la instalación de piscinas portátiles en terrazas sin contar con la debida supervisión de un técnico que nos podrá aconsejar sobre la altura máxima de agua de llenado. No en vano, conviene recordar que cuanto más echemos, mayor peso tendrá la piscina.
Si no tenemos problemas de peso –o tenemos controlada esta cuestión tras consultar a un técnico– podemos valorar las siguientes opciones:
Piscina hinchable de baja altura. se trata de uno de los grandes éxitos del sector pues su poca altura, lo convierte en la más segura para niños entre 2 y 10 años. los modelos más grandes pueden tener una capacidad de 90 litros y una longitud de un metro y medio.
Piscina con altura. esta última permite auténticas zambullidas gracias a sus 230 litros de capacidad. sin embargo, requiere que estemos muy atentos en el caso de que tengamos niños de corta edad.
Piscinas con depuradora. si el espacio resulta adecuado y no hay problemas con el peso, podemos recurrir a una de estas amplias piscinas que incluyen un sistema de depurado del agua. están fabricadas con tres capas de pvc y poliéster resistente. además, resulta tan amplia que toda la familia podrá zambullirse en su interior al mismo tiempo.
Centro acuático hinchable. Especialmente concebida para el regocijo de los más pequeños de la casa. Completamente tematizadas, con tobogán y todo lo preciso para que la diversión acuática no cese. Cuentan con un suelo acolchado, su montaje es muy sencillo y está fabricado con vinilo.
Piscina plegable. Las hinchables tienen el inconveniente de que se pinchan con facilidad. Un detalle que puede remediarse si optamos por una piscina plegable de tela rígida que es incluso adecuada para el baño de mascotas. Al concluir la temporada, la vaciamos, la plegamos y la guardamos a la espera del próximo año. A esto se añade que es fácilmente transportable.
Te recomendamos que eches un vistazo a todos los modelos que citan en este artículo del diario Expansión.
En definitiva, un bajo tiene muchas ventajas, puede convertirse en el mejor lugar para disfrutar de nuestra propia piscina. ¡Se te acabarán las excusas para mantenerte seco!
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