Parece que el sol y la luz son factores que fomentan la felicidad pues, como explican en este artículo de El Periódico, el 20 de junio (también llamado Yellow Day) está considerado el día más feliz del año. En definitiva, saber cuáles son las claves para ser feliz es un tema que nos interesa. Vamos a ver si podemos aclararlo un poco en el siguiente artículo.
*36 viviendas en proyecto de construcción sitas en calle Pardo Gimeno con Calle Capitán Déma y Calle Los Doscientos de Alicante. Solicita información de las condiciones de la promoción. Promueve “ARQURA HOMES, FONDO DE ACTIVOS BANCARIOS”. El precio de las viviendas incluye 1 o 2 plazas de garaje y trastero. Toda la información y entrega de la documentación de esta promoción, de acuerdo con lo establecido en la Ley 8/2004, de 20 de octubre, de la Vivienda de la Comunidad Valenciana será facilitada en la oficina nº 34 del Edificio Condes de Buñol sito en la calle Isabel la Católica, nº 8 (46004-Valencia). La información y las imágenes publicadas aquí son meramente ilustrativas por lo que no tienen carácter contractual y se encuentran sujetas a modificaciones por exigencias técnicas, jurídicas o comerciales de la promoción.
Lo cierto es que siempre se ha dicho que el dinero no da la felicidad, pero parece que sí que es cierto que ayuda a tenerla. Al respecto podemos hacernos eco de en un artículo publicado en la revista Muy Interesante donde explican que, según un estudio de la Universidad de Purdue en Indiana (EE. UU.), un determinado volumen de ingresos puede mejorar nuestro nivel de satisfacción con la vida. En concreto, en dicha noticia detallan que los científicos analizaron los datos de una encuesta internacional realizada a más de 1,7 millones de personas procedentes de 164 países. Parece que las mujeres necesitan más dinero para alcanzar la ansiada felicidad, mientras que los hombres se conforman con un poco menos. En concreto, ellos reconocen que pueden ser felices con 90.000 dólares anuales, mientras que las mujeres son un poco más ambiciosas y piden 100.000 dólares.
También el nivel educativo importa en esta cuestión. Así, aquellas personas con escasa educación admiten que con 70.000 dólares podrían lograr la felicidad, mientras que aquellas con un nivel educativo moderado necesitan un poco más, pues ya hablamos de 85.000 dólares. Finalmente, las personas con estudios superiores pican un poco más alto y sitúan en 115.000 dólares el nivel de renta que consideran imprescindible para sentirse plenamente satisfechas.
Las diferencias entre los diferentes continentes también son notables. En este sentido, mientras que los australianos necesitan 125.000 euros para ser felices, en Europa del Este pueden serlo por tan solo 45.000 euros.
Otro estudio pone en tela de juicio estas conclusiones, ya que sostiene que la clave de la felicidad no es el dinero, sino las relaciones sociales. Al menos así lo afirma el estudio realizado por Robert Waldinger, psicoanalista doctorado en psiquiatría por la Universidad de Harvard (EE.UU) y director del estudio sobre el desarrollo adulto, cuyos resultados analizamos de inmediato.
Dicha investigación se emprendió en 1937 y culminó en 2017, y es hasta la fecha el estudio más amplio y completo que se ha realizado sobre la felicidad.
Según el estudio, “las relaciones cercanas, más que el dinero o la fama, son lo que mantiene felices a las personas a lo largo de sus vidas. Esos lazos protegen a las personas de los descontentos de la vida, ayudan a retrasar el deterioro mental y físico y son mejores predictores de vidas largas y felices que la clase social, el coeficiente intelectual o incluso los genes”.
En definitiva, aunque el dinero nos parece importante en nuestro camino hacia la felicidad, hay otras reglas para ser feliz como, simplemente, cultivar nuestras amistades y mantener una activa vida social, tanto con amigos como con la familia.
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