Otra manera de divisar la ciudad hispalense desde las alturas la encontramos en la Torre del Oro, ubicada a la vera del río Guadalquivir y cuya visita es ineludible.
Al parecer, el apelativo de oro se lo ganó por el reflejo dorado que el edificio dejaba en las aguas del río.
En la restauración del año 2005 se descubrió que este color se debía la mezcla de mortero de cal y paja prensada con la que fue levantada esta emblemática torre defensiva del siglo XIII.
Mucho más modernas que el anterior monumento son estas setas a las que también se las conoce como proyecto Metropol Parasol del arquitecto Jürgen Mayer.
A día de hoy se ha convertido en la estructura de madera más grande del mundo, además de un magnífico mirador –pues se encuentra a a 28.5 metros de altura– desde el que contemplar la ciudad.
Se construyó a finales del siglo XIX junto a la Fábrica de los Perdigones.
Gracias a sus 45 metros de altura podremos divisar de una manera única el horizonte de edificios que integran la ciudad.
Ubicada junto al Acuario, esta estructura de 40 metros nos ofrece un viaje a las alturas de la ciudad gracias a sus 30 cabinas.
Todo ello, además, sin perder un ápice de comodidad pues los habitáculos están climatizados, cuentan con mullidos asientos y música ambiental.
Esta torre, localizada en la isla de la Cartuja, fue construida en 1992 por la empresa suiza Schindler que en aquellos años era el proveedor oficial de los sistemas de ascensores de la Expo’92.
En ella encontramos dos ascensores panorámicos con los que cualquier visitante puede trasladarse hasta la terraza mirador, ubicada a 60 metros de altura.
Sin ánimo de hacer publicidad, si queremos hablar de las zonas con mejores vistas de Sevilla no podemos olvidar mencionar la terraza de este centro comercial donde al tiempo que paladeamos unos bocados gourmet, nos podemos extasiar con las vistas sobre la urbe.
En suma, el particular skyline de Sevilla se disfruta tanto como sus calles y sus monumentos, pero ¿por qué no gozar con su contemplación desde la propia terraza de nuestro hogar? En concreto, desde lo alto del edificio Atalaya Sevilla, un proyecto de 55 viviendas en el centro de la ciudad que proporciona a los propietarios de las viviendas ubicadas en las plantas superiores una panorámica que no tiene nada que envidiar a la que encontramos en los altos de la icónica Torre del Oro.
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