Factores como el exceso o defecto de agua, abundancia de sol e incluso su carencia inciden en el buen aspecto de la planta. A veces, se muere en pocos días sin que sepamos muy bien qué hicimos mal. Toma nota de estos consejos.
No podemos pasar por alto que determinadas especies son más delicadas y peliagudas de cuidar. Por lo tanto, sobre todo si somos novatos o no disponemos demasiado tiempo para dedicárselo a las plantas, conviene escoger aquellas variedades que resulten fáciles de cuidar. No te pedimos que escojas un cactus, pero sí que busques plantas que no requieran riego continuo.
Uno de los errores que solemos cometer sin saber que tiene una importancia capital es no limpiar el polvo y suciedad que se va acumulando en las hojas.
De hecho, quizás no sepas que las plantas también respiran por ellas y que si estas se encuentran cubiertas de polvo no lo podrán hacer correctamente
Para ello puedes utilizar un trapo mojado y pasarlo por las hojas hasta dejarlas limpias.
Si eres un poco despistado y a menudo olvidas regar tus plantas, puedes escoger un día de la semana para hacerlo. De esta manera, adquirirás la costumbre y difícilmente te olvidarás de ello.
En cualquier caso, te aconsejamos que siempre compruebes con las manos que la tierra está seca, pues si está húmeda todavía no conviene regar.
Con ocasión del invierno, con el encendido de la calefacción, las plantas pierden humedad. Por este motivo, te aconsejamos que conserves un pulverizador cerca bien provisto de agua para poder ocuparte de esta tarea de vez en cuando sobre las hojas.
Procura, asimismo, no situarlas cerca de un radiador o de un aparato de aire acondicionado pues las perjudicará.
Esta parte es fundamental. Por lo tanto, procura utilizar abono en su versión líquida que podrás usar cada cada quince días. Ten muy en cuenta las indicaciones del producto pues si te excedes con la dosis, quemarás las raíces.
No te empeñes en colocar una planta en una zona carente de luz pues no mostrará su mejor aspecto. Por lo tanto, procura siempre saber si necesita mucha o poca luz. Algunas especies, por cierto, llevan muy mal las corrientes de aire. Te aconsejamos que te informes bien acerca de los cuidados que precisa la planta antes de lanzarte a su compra.
La mayoría de las plantas demandarán un cambio de maceta y tierra cada dos años, todo dependerá de su crecimiento. Es cierto que es una tarea engorrosa, pero que conviene tener muy presente si las queremos lucir bonitas. Además, te ayudará a relajarte con la jardinería. Te animamos a que consultes este artículo de la web Ecología Verde en el que encontrarás vídeos muy ilustrativos.
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