Lo cierto es que el que será el edificio más alto del mundo en un breve plazo de tiempo todavía se encuentra en construcción.
Demoras y más demoras han caracterizado el levantamiento de la llamada Torre Yeda que se ubica en la ciudad del mismo nombre y que tendría que haber sido concluido en 2018.
No obstante, esta obra faraónica no cesa de tropezarse con impedimentos que impiden que avance todo lo rápido que debiera.
Aunque no ha trascendido cómo evolucionan las obras, en febrero de 2018 se supo que únicamente se habían completado 60 plantas de las 169 previstas. Y, al parecer, no será hasta 2021 cuando esté terminada esta impresionante mole de un kilómetro de altura.
Los más impacientes están deseando ver este superlativo edificio que se estima que costará unos 2.000 millones de dólares.
La torre de Yeda dispondrá de 59 ascensores que podrán dejar a sus pasajeros en un poco más de un minuto en lo alto de la terraza observatorio, ubicada en las plantas 157 y 158 ( a 644 metros de altura). Contará con 439 apartamentos, 200 habitaciones de hotel y más de 2.200 plazas de garaje.
Mientras llega (o no) el momento que lo destronen, el Burj Khalifa, en Dubai, es actualmente el edificio más alto del mundo con sus 828 metros.
Es imposible no visitar la ciudad y no acabar recalando en la impresionante terraza del Burj Khalifa que nos permite disfrutar de atardeceres excepcionales.
Oficinas, un hotel, viviendas privadas, restaurantes y, por supuesto, su mirador. Inicialmente su presupuesto ascendía a 4.000 millones de dólares, pero la culminación de esta magna obra acabó exigiendo un desembolso de 20.000 millones.
Lleva una década ostentando la consideración de ser el más alto del mundo, pero se avecinan, como decíamos, cambios.
No en vano, dentro de la misma ciudad, otro proyecto en construcción, esta vez obra del arquitecto valenciano Santiago Calatrava, le disputa el puesto.
Se trata de The Tower y, en palabras de su autor, condensa "la tradicional arquitectura islámica y elementos de vanguardia, tanto en diseño como en ingeniería y sostenibilidad". Dicho edificio se calcula que llegará hasta los 1.300 metros y permitiría a Dubai continuar siendo la ciudad con la torre más alta del mundo.
Lo cierto es que la meta de los 1.000 metros de altitud es muy ambiciosa y, sin duda, la construcción de los edificios mencionados no estará exenta de problemas. En cualquier caso, parece que solo tendremos que esperar a 2021 para saber cómo termina esta historia de vértigo.
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