En este sentido, ya te adelantamos que necesitas hacerte con productos tan básicos y naturales como los que siguen: limón, bicarbonato, vinagre, agua oxigenada y detergente. Este último puede ser un excelente recurso en el caso de que fallen todos los anteriores.
Dicho todo esto, vamos a contarte cómo has de utilizarlos para eliminar cualquier rastro de suciedad.
En el caso de que haya manchas producidas por orina, sudor y vómito, puedes recurrir a esta efectiva mezcla. Eso sí, aplícala cuanto antes para que ofrezca mejores resultados.
Ya nos hemos extendido en anteriores artículos acerca de las excelentes virtudes de este producto para acabar con cualquier mancha que se ponga a tiro. Solo tienes que hacer una pasta con esta sustancia mezclandola con agua y dejarla actuar.
El vinagre blanco es un producto barato, ecológico y eficaz para combatir las manchas tan habituales en el colchón o la misma almohada. Empapa un paño con vinagre y frota en aquellas zonas afectadas por la suciedad.
Cuando no aprecies resultados con los métodos descritos, prueba a emplear un detergente líquido. Solo necesitas mojar un paño y, una vez que esté húmedo, lo rocías con un poco de detergente. Frota bien y aclara la zona con agua.
Si se trata de una mancha de sangre, puedes combatirla con agua oxigenada.
Sin duda, una buena manera de mantener nuestro colchón en un estado óptimo es a través de una limpieza regular. Así, con independencia de las manchas que se puedan producir de manera puntual, te aconsejamos que te animes a higienizar convenientemente tu colchón una vez al año.
En cualquier caso, es importante que tengas la precaución de hacerlo por la mañana, aprovecha los días soleados y abre convenientemente las ventanas durante varias horas para que se vaya secando cualquier resto de humedad.
También es recomendable que aspires con la aspiradora, y por ambas caras, una vez al mes.
Pero, sobre todo, conviene que tengas en cuenta estas pautas que debes aplicar a diario:
Abre las ventanas antes de hacer la cama pues, de esta manera, evitas que proliferen los ácaros. Recuerda que estos pequeños arácnidos son de tamaño microscópico y se alimentan de las células muertas de nuestra piel. Pero su presencia no es inocua pues pueden agravar problemas como la dermatitis atópica a la que son propensos ciertos niños e incluso producir dolores de cabeza o alergias, entre otros.
Sacude tanto las sábanas y las almohadas antes de hacer la cama.
Cambia las sábanas con una frecuencia semanal.
De todas maneras, y sobre todo en el caso de niños de corta edad, te recomendamos que emplees una funda o cubrecolchones con el que lograrás poner el colchón a buen recaudo de este tipo de accidentes.
Sin duda, el tema es muy amplio. Por lo tanto, puedes profundizar un poco más en todo ello en este artículo de El Mueble que te ayudará a efectuar una limpieza de primera.
O cuéntanos lo que necesitas y nos pondremos en contacto contigo lo antes posible