Los hogares cuentan cada vez con una mayor tecnología que nos brinda un mundo de posibilidades: subir y bajar las persianas de manera automática, encendido y apagado inteligente de las luces de la viviendas, control de la temperatura…
Así, por ejemplo, las bombillas con sensores domóticos detectan la cantidad de luz solar presente en la casa. De esta manera, se regulan automáticamente y reducen la potencia para evitar el derroche energético. Por lo tanto, unas bombillas inteligentes nos ayudarán a rebajar nuestro consumo.
Así, por ejemplo, las bombillas con sensores domóticos detectan la cantidad de luz solar presente en la casa. De esta manera, se regulan automáticamente y reducen la potencia para evitar el derroche energético. Por lo tanto, unas bombillas inteligentes nos ayudarán a rebajar nuestro consumo.
Estas luces también se encienden y apagan cuando detectan presencia en la vivienda. Así, no ocurrirá que nos dejemos una luz encendida en el dormitorio o en el salón a pesar de que no haya nadie.
Una función especialmente útil en el caso de niños pequeños, a los que se les suele olvidar apagarla al abandonar la estancia. También nosotros cuando salimos de casa –de vez en cuando–,y a causa de las prisas, nos dejamos alguna lámpara encendida.
Por lo tanto, conseguimos que nuestras casas no solo se vuelven más cómodas, sino que también resulten más eficientes. A nadie se le escapa que los tiempos actuales nos obligan a esmerarnos con el consumo energético, evitar el derroche y, por lo tanto, reducir el impacto ambiental de nuestra vivienda.
Sin embargo, muchos creen erróneamente que instalar un sistema de domótica en casa les supondrá un importante gasto y que, para colmo, necesitará realizar importantes obras. Pero esto no es cierto. De hecho, la domótica se caracteriza por los siguientes aspectos:
No se precisan cables. Únicamente con la instalación de Wifi podremos llevar a cabo nuestro sistema domótico. En una casa ya construida, se suele emplear la la domótica inalámbrica Z-wave con una instalación rápida, sencilla y económica. Por el contrario, si la vivienda está en obras o quieres aprovechar una reforma, lo más apropiado es la solución cableada conocida como KNX.
Podemos hacerlo nosotros mismos sin tener que recurrir a un profesional.
La domótica no es una tecnología cara, sobre todo teniendo presente que nos ayuda a ahorrar en nuestro consumo consumo y abarata de forma considerable nuestras facturas. Además, no es lo mismo automatizar una casa cuyas dimensiones no superan los 90m2 que otra de 500m2, tal y como recalcan en este artículo de Domótica Integrada.
Sin duda, la domótica en los hogares es una tecnología que está en pleno auge dadas las grandes ventajas que aporta a nuestras casas.
Lo cierto es que las empresas dedicadas a su instalación proliferan por todo el mapa español y cada vez nos convencen más los sistemas domóticos. Por lo tanto, seguramente tienes alguna cerca que puede ayudarte a solucionar todas tus dudas.
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