Un DIY muy sencillo y rápido de hacer. Todo lo que hemos utilizado es lo siguiente:
- Tabla de madera ya cortada en las dimensiones del colgador.
- Ganchos
- Betún de Judea
- Aguarrás (para diluir el betún)
- Pincel
- Pletina para colgar cuadros
- Destornillador
Una vez tengamos todo el material, el primer paso será disolver el betún de Judea en aguarrás, ya que si no dejará tu madera muy oscura. Es recomendable hacer pruebas antes de pintar la madera definitiva para asegurarte de que sea el tono que buscas.
Si el acabado del betún de Judea no te convence, puedes utilizar un tinte o barniz, los encontrarás de varios tonos. Si prefieres darle color a tu colgador, siempre puedes pintarlo con pintura para madera. Una vez hayas decidido el acabado de tu madera, píntala y déjala secar. ¡No olvides los laterales!
El siguiente paso es atornillar los ganchos a la madera con la separación que creas conveniente entre uno y otro. Ten en cuenta el tamaño de las tazas y la longitud de la madera. Lo ideal es dejar unos 20 cm entre cada gancho.
Una vez puestos los ganchos, damos la vuelta a la tabla y atornillamos el colgador para poder fijar nuestro soporte para tazas a la pared. Recuerda que el colgador debe ser lo suficientemente resistente para soportar el peso de las tazas.
Y cuando ya esté terminado, lo colgamos en la pared y colocamos nuestras tazas preferidas. ¿Fácil y vistoso verdad?
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