Te proponemos personalizar la típica mesa auxiliar de Ikea que muchas personas tienen disponible en casa, aunque cualquier otra valdrá.
Únicamente necesitas unas pinturas adecuadas para pintar sobre madera y dibujar los círculos típicos del tablero del parchís. Recuerda que necesitarás el azul, el rojo, el verde y el amarillo.
Después prepara unas fichas para jugar. Puedes utilizar cualquier material que tengas por casa como los tapones de las botellas de agua que después de pintarlas con su correspondiente color, te servirán estupendamente para jugar y no solo los peques, también los mayores.
En la web de Deco & Kids, te explican parte del proceso.
No pasa nada. Puedes conseguir uno propio y muy personal siguiendo estas instrucciones. Ya verás que es divertido jugar, pero mucho más será elaborarlo. Toma nota de los materiales necesarios:
Goma Eva de colores
Regla
Tijeras
Rotulador blanco y permanente
Lápiz
Pegamento
En primer lugar, tienes que recortar todas las fichas. Vamos a hacerlas de un tamaño un poco más grande para que los niños no las extravíen. Te proponemos unas medidas de 7,5 cm de largo x 4,5 cm de ancho.
A continuación, realiza 28 fichas en goma eva negra, y luego hacemos lo mismo con goma eva de color azul, rojo, amarillo y verde, pero puedes elegir los colores que prefieras.
Después, pinta los puntos de cada ficha con el rotulador blanco permanente.
Para ello, utiliza la regla y pinta una raya que cruce por la mitad. Recuerda hacer un punto en medio como las auténticas piezas.
Recuerda incluir todas las combinaciones de punto posibles. Todo un ejercicio de matemáticas que mantendrá distraídas las mentes de los peques.
Una vez que las tengas todas, comienza a pegarlas. Recuerda añadir la base negra.
¡Y que comience el juego! Ya verás cómo tus hijos aprecian estos juegos caseros y, además, les enseñas todo el poder que encierran sus manos. Toda una lección que conviene que les enseñemos cuanto antes.
No podemos ir a la tienda a comprar disfraces como antes, pero ni falta que hace. Nuestra casa nos brinda materiales de sobra para confeccionar más de un disfraz para divertir a tus hijos. En concreto, te proponemos un disfraz de buzo. Únicamente necesitarás lo siguiente:
Gafas de bucear.
Tubo negro de acordeón.
Dos botellas de agua.
Pintura negra.
Cinta adhesiva amarilla.
Un chupete.
Lo más laborioso será la confección del tanque de oxígeno. Para ello pintamos las botellas de agua de negro y las pegamos entre sí con una cinta adhesiva amarilla. No pasa nada si no tenemos de ese color.
Para terminar, solo necesitaremos incorporar unos cordones en la parte superior de cada botella para que el niño pueda ponérsela a la espalda.
Después pintas de negro el tubo como el de la imagen, pones un chupete en uno de los extremos y lo decoras con una cinta adhesiva amarilla.
Ya te adelantamos que hay mucho que hacer en casa con todos los recursos que encontrarás en ella. Una manera amena de pasar el tiempo mientras elaboran todos estos materiales y, por supuesto, jugando con ellos.
O cuéntanos lo que necesitas y nos pondremos en contacto contigo lo antes posible